En un mundo tan ajetreado, nos resulta cada vez más importante encontrar un rinconcito de paz en donde podamos conectar con nuestro interior y nutrir nuestro espíritu. En ocasiones esto nos puede resultar fácil, pero en otras puede ser algo complicado; sin embargo, es esencial que recordemos que contamos con diversas herramientas que nos apoyan a alcanzar ese estado de plenitud que tanto buscamos, de una manera más sencilla. Los llamadores de ángeles, con su maravillosa historia, son un recordatorio de que las puertas del mundo espiritual siempre están abiertas para cada uno de nosotros, llenándonos de amor, luz, bendiciones, guía y protección, cada vez que nos demos la oportunidad de tocarlas. Es por eso, que te invito a descubrir la hermosa historia de los llamadores de ángeles, para que recuerdes que no estás sólo y que los ángeles son capaces de llenar tu vida de emociones positivas si es que así lo deseas.
Historia de los Llamadores de Ángeles
Hace miles de años, los seres humanos convivían estrechamente con los ángeles, ya que Dios los había enviado al mundo terrenal para ayudarnos con nuestro crecimiento espiritual; sin embargo, los humanos no tomamos conciencia de esto y en lugar de conectarnos más con el amor, nos distanciamos. Debido a esto Dios ordenó a los ángeles que regresarán al Cielo y que nos dejaran solos, para que libremente decidiéramos si queríamos encontrarnos nuevamente con la Luz Celestial o alejarnos de Ella.
Los ángeles le comunicaron a la humanidad que debían retornar al Cielo, pero como estos seres celestiales habían convivido demasiado tiempo con nosotros, nos tenían un profundo amor y les daba mucha tristeza tener que dejarnos solos, por lo que no se resignaron a la separación y buscaron una forma de seguir en contacto con nosotros.
De acuerdo con esta hermosa historia, los ángeles regalaron a los seres humanos unos hermosos colgantes en forma de esfera que, al ser agitados, emitían un delicado sonido, similar al tintineo de las campanillas. Estos colgantes se convirtieron en símbolo de amor, protección y principalmente, de la conexión divina que existe entre el mundo celestial y el mundo terrenal. Los ángeles instruyeron a los humanos que, aunque ya no pudieran ver a sus ángeles, aún podían llamarlos en los momentos de desamparo, inseguridad o tristeza; tan sólo debía agitar sus llamadores de ángeles para que estos bellos seres alados les brindaran su guía y auxilio. Sin embargo, para que esto ocurriera, cada llamador de ángeles debía ser exclusivo de la persona que lo portara, nadie más podía utilizarlo y debía ser llevado cerca del corazón.
Usos de los Llamadores de Ángeles
A lo largo de la historia, los llamadores de ángeles han tenido un lugar especial en el corazón de los seres humanos, se les atribuye la protección, purificación y renovación de espacios y personas, principalmente, de bebés y mujeres embarazadas, por lo que se recomienda usar este artículo divino durante ese periodo especial de la vida. También, se recomienda colocar un llamador de ángeles en la entrada de los hogares, negocios o habitaciones que se deseen purificar, ya que al abrir y cerrar la puerta, el llamador se mueve y emite su suave sonido, creando un entorno de paz.
Sonido de los Llamadores de Ángeles
El sonido que generan los llamadores de ángeles es algo celestial en sí mismo, ya que es lo suficiente suave para reconfortar nuestros corazones y calmar nuestras almas sin resultar algo abrumador, por lo que de manera inmediata, nos transporta a un sitio de paz y amor, recordándonos con cada tintineo que los ángeles están cerca, velando por muestra protección y bienestar.